160.- "Tuenti "

Abusar de Twenty o Facebook puede afectar al correcto desarrollo de emociones humanas como la compasión, la admiración y desarrollar indiferencia de los usuarios ante el sufrimiento humano, según revela un estudio del Instituto del Cerebro y la Creatividad de la Universidad del Sur de California (USC).
«Necesitamos un poco de tiempo y reflexión para procesar algunos tipos de pensamiento, especialmente la toma de decisiones morales respecto a situaciones físicas o psicológicas de otras personas», explicó una de las autoras del informe, Mary Helen Immodirno-Yang.

La velocidad de gestión del cerebro humano ante los estímulos de las emociones sociales lleva un tiempo en la vida real que es superior al que media entre el estímulo y respuesta en la “vida virtual”.

Los autores concluyen que la vida real es el lugar idóneo para que los humanos encuentren oportunidades de sentir compasión o admiración, a diferencia de las rápidas herramientas ofrecidas por los medios digitales, que "pueden alejar de su propia humanidad a los usuarios demasiado activos".

Manuel Castells, investigador de la cátedra de Comunicación, Tecnología y Sociedad de la Universidad de California, resta importancia al impacto de estas redes sociales, ya que, según sus palabras, pueden contribuir a la reflexión emocional "más que la televisión y los videojuegos".

¿Qué opinas de los anteriores planteamientos?

Por cierto, "Enjuto Mojamuto" dice que el peor día de su vida es "el que no tiene conexión a internet".

159.- ¿ Separar por sexos ? ¿ Acierto, Fatal Error ?

El colegio Montessori en Salamanca, ha propuesto para el próximo curso separar a sus alumnos por sexo: chicas y chicos estarían en diferentes aulas.
Esta idea de segregar niños y niñas va ganando partidarios. Sus defensores se basan en las supuestas diferencias de rendimiento de sus cerebros y la cuestión abre un debate
¿es esto una oportunidad para mejorar o un fatal error ?
El Consejo Escolar de dicho centro de Salamanca, que ante las polémicas reacciones, ha paralizado manera temporal, defiende la educación diferenciada como la metodología pedagógica idónea para frenar las desigualdades de “rendimiento, reconocimiento y comportamiento entre los chicos y las chicas”.
"Ellas rinden más, tienen excelentes expedientes y una madurez más temprana" afirma el neurólogo Francisco José Rubia, catedrático de Medicina de la Universidad Complutense de Madrid, y añade que: “Ya deberíamos dejar de vincular la educación diferenciada con ciertas creencias religiosas o ideologías ultraconservadoras” Numerosas investigaciones comparan los resultados de la enseñanza mixta con la educación separada obteniéndose mejores en la última. Por ejemplo, los que escolarizan por sexos obtienen calificaciones más altas en las Pruebas de Acceso a la Universidad, especialmente los colegios femeninos. Esto ocurre cada vez más en distintos países del mundo: las mujeres avanzan puestos en rendimiento escolar, mientras que en el varón aumentan los porcentajes de abandono de la escuela.

158.- Bentham - la sociedad del "panóptico"

Ya en el S. XVIII, J. Bentham habló de una nueva forma de vigilancia: el panóptico ,que posibilitaba a un solo guardia observar, ver (opticon) a todos (pan) los prisioneros sin que estos supieran si estaban o no siendo observados.
Como los vigilantes no podían ser vistos, los “vigilados” estaban en permanente tensión ya que no sabían cuando el vigilante los observaba y cuando no.
Bentham no sospechaba que tres siglos más tarde ese sistema podría generalizarse en una sociedad donde numerosos satélites controlan permanentemente señales de móviles, tarjetas de crédito, contraseñas en las redes, códigos de seguridad, movimientos de los ciudadanos en capos de fútbol, bibliotecas, calles, centros escolares….

Hemos debatido en clase la cuestión de la instalación de las cámaras en nuestro IES, el resultado de las opiniones lo podéis consultar en el apartado comentarios. Lo cierto es que tengo que indicar que estoy sorprendida porque pensaba que habría una cierta resistencia a su aceptación y me encuentro que no es así. Esto me preocupa algo, porque entiendo que lo saludable es desarrollar estrategias de autocontrol de nuestro comportamiento. Somos nosotros mismos los que debemos darnos la norma y si tiene que haber algo externo que “vigile” nuestra conducta estamos fracasando, de alguna manera, al no ser cada cual quien lo haga para consigo.

Si tenemos interiorizado que debemos tener un comportamiento cívico y adecuado porque es nuestra obligación y el derecho de los demás, no argumentaremos que “hay que comportarse bien porque si no salimos en las cámaras”, la “cámara”, pienso, tiene que ser nuestro propio sentido de la responsabilidad y ser cada uno de nosotros quienes reprobemos nuestra propia conducta cuando ésta no sea la adecuada; sólo así estaremos formando una conciencia autónoma y no dependiente.