domingo, 7 de febrero de 2010

187.-RESPONSABILIDAD.- Leyendo juntos "¿Qué hay que enseñar a los hijos?" (Victoria Camps)


RESPONSABILIDAD
“Los niños de las sociedades avanzadas son víctimas de una superprotección paterna y materna. Digo víctimas porque esa protección excesiva sin duda acaba perjudicándoles. La intención es buena:queremos lo mejor para nuestros hijos y entendemos que querer lo mejor es facilitarles las cosas al máximo, evitarles traumas y malos ratos, impedir que sufran y lo pasen mal. Entre los sufrimientos habituales está el de tener que responder de lo que uno hace si no ha hecho lo que se esperaba que hiciera. Pero esa responsabilidad cada vez es más complicada: porque hay menos normas, somos más flexibles, más permisivos, más tolerantes, estamos más desorientados y los cambios nos desconciertan. ¿Cómo podrá aprender un niño a responder de sus actos si no hay normas o las que hay nunca son precisas? Los castigos y los premios de épocas que ya hemos dejado atrás fueron nefastos, también lo fue la disciplina y la rigidez de las reglas que tuvimos que aprender y seguir. La idea de pecado con todos sus grados de gravedad creaba terribles angustias y un sentimiento de culpa insoportable y, además, ridículo. Una se sentía culpable de ir sin mangas o escotada, de llevar pantalones o de bailar. Pero hay una pregunta interesante que conviene hacerse: Desaparecida la noción de pecado se ha evaporado al mismo tiempo la idea de culpabilidad. ¿Es bueno que el sentimiento de culpa haya desaparecido? ¿No es inevitable para que haya educación en la responsabilidad que exista el sentimiento de culpa? No nos gusta hablar de culpa preferimos hablar de responsabilidad. Pero observamos que al desaparecer aquélla. ésta también se esfuma. Y es que la culpa y la responsabilidad son inseparables.
Los antropólogos distinguen entre dos culturas: la cultura de la vergüenza y la cultura de la culpa. Son como dos fases históricas de evolución de la moralidad. similares a la formación de la conciencia moral en el niño a que me he referido antes. La cultura de la vergüenza es más primaria. se apoya en sanciones externas y no en la convicción interna de pecado o de haber obrado mal. Uno siente vergüenza no tanto por lo que ha hecho. sino por la reacción que su supuesta falta produce en los demás. La culpa. en cambio. es el sentimiento interno de haber transgredido una ley o de haber hecho algo malo. Podemos sentirnos culpables sin que nadie repare en nuestra mala acción.
Tanto la vergüenza como la culpa han sido desastrosas y causantes de más de un desvío psíquico en la formación de la conciencia de las personas. Por eso tendemos a rechazar ambas culturas. La sanción externa que produce el sentimiento de vergüenza es propia de sociedades estáticas y homogéneas. las sociedades donde brotó y se cultivó, por ejemplo, el sentimiento del honor. Una persona deshonrada
era una vergüenza pública y debía sentirse a sí misma como causa de esa vergüenza. El sentimiento de culpa lo han fomentado sobre todo los códigos morales super rigurosos de las religiones(…). Pero volvamos a la pregunta anterior: ¿La mala conciencia, el sentido de la vergüenza o de la culpa, no son inseparables de la transmisión de valores?¿Cómo enseñar que algo está mal si no se produce al mismo tiempo un sentimiento de rechazo hacia lo malo? La moral no es una cuestión sólo de razón, sino de sentimientos. El niño no aprenderá a comportarse correctamente si no siente, al mismo tiempo que sabe, que ciertas cosas son mejores que otras”. (p. 25-26 )
Fuente: Extractos de las páginas 25-26 del libro de Victoria Camps "¿Qué hay que enseñar a los hijos?" Ed. Proteus

33 comentarios:

Noelia 1º Bach A dijo...

Estoy de acuerdo en que en la actualidad en la sociedad en la que vivimos, se ha creado una superprotección hacia los niños de hoy en día.

Por un lado esto no es nada perjudicial,si se aplicara de una forma adeacuada,pero como la misma palabra dice,es excesivo el cuidado con el que tratamos a los más pequeños.No es que no debamos cuidarlos,sino que en ocasiones se dan casos en los que no dejamos que ellos mismos actúen por sí solos,sino que la figura paterna o materna responde inmediantamente ante cualquier situación,y sobre todo ,ante las situaciones malas.

Por otro lado no veo correcto eso de que no dejemos a los niños responder por sus errores,ya que ellos son los que los han cometido.Siempre hay que hacerles ver que esas determinadas cosas no están bien hechas y que no se pueden volver a repetir.
Aunque tampoco hay que sobrepasarse con la regaña en ese momento,ya que mires por donde lo mires son niños.

En cuanto a los términos de culpa y verguenza estoy totalmente de acuerdo con las definiciones dadas en el texto.Dos sentimientos que se dan con frecuencia en la infancia y que ambas son necesarias para que el niño asimile mejor las cosas y con el paso del tiempo tenga la responsabilidad suficiente.

Bea 1º Bach A dijo...

Me ha llamado la atención que el término responsabilidad hace referencia a responder, no me había fijado en eso antes.

La responsabilidad, es un acto de conciencia que debemos tener en cuenta nosotros, es decir, poder tener respuesta sobre algo que hemos hecho, esto quiere decir que si alguien tiene respuesta para algo que ha hecho es una persona responsable, pero si no tiene respuesta, si no responde , es una persona que cuando le preguntas se esconde o da largas como intentando cambiar de tema es una persona irresponsable y aveces es verdad que tenemos esas actitudes y esto nos hace pensar en ello.

Jenni 1º Bach B dijo...

Los niños de hoy en dia tienen una superprotección por los padres, le facilitan las cosas al máximo, le evitan traumas, malos tragos, etc hasta el punto de responder por ellos, no educándoles en la responsabilidad.

También muchos padres ponen menos normas que antes y son más permisivos. Los castigos y los premios ya se han dejado atrás.

¿Es bueno que el sentimineto de culpa haya desaparecido? ¿No es inevitable para que haya educación en la responsabilidad que exista el sentimiento de culpa?

Yo creo que hay que saber reconocer cuando cometemos un error y sentir culpa por ello.
Un niño aprenderá a comportarse
cuando sienta que ciertas cosas son mejores que otras y para eso tiene que sentir algo de dolor para interiorizar esto.

Alnair 1º Bach B dijo...

Los niños que son criados con una superprotección excesiva acaban siendo personas que no son capaces de enfrentarse a los obstáculos de la vida y siempre se esconden detrás de las demas personas y no aprenden la responsabilidad, por eso encuentro un grave error en superprotegerlos.

´Thais 1º Bach A dijo...

La generación actual está teniendo una superprotección desmedida, no es que pidamos que los padres no se preocupen por sus hijos pero tampoco que lo hagan de esa manera tan excesiva.

Muchos adolescentes en un futuro no muy lejano no serán capaces de enfrentarse a sus problemas si siguen estando tan protegidos, porque están acostumbrados a que le hagan todo, bien porque sus padres crean que no son capaces de conseguir sus objetivos o por miedo a que fracasen.

La mayoría de padres conceden a sus hijos todos los caprichos que piden sin pensar en las consecuencias que este hecho puede tener a la larga porque cada vez serán más cosas las que pidan. Pretenden tener todo pero a cambio de nada.

No hay que usar la violencia, pero sí imponer una serie de normas que deben de acatar desde que son pequeños porque sino la situación cada vez irá a más y habrá un punto culminante en el que ya no haya marcha atrás. Por eso debende enseñarnos y dejar que comentamos errores para que aprendamos que en la vida no es todo color de rosas y que las cosas hay que conseguirlas por mritos propios porque nadie regala nada

Daniel 1º Bach A dijo...

Es bueno que los padres protejan a sus hijos, pero hay que darles poco a poco algo de libertad, que se vayan desenvolviendo ellos solos y aprendan a ser autónomos.

Si al adolescente no se le da libertad, nunca se convertirá en adulto ni madurará correctamente, además de poder tener problemas psicológicos en un futuro si se le protege demasiado, y a la hora de buscarse su propia vida no sabrán lo que hacer, pues son los fallos y los golpes de la vida los que de verdad nos enseñan y nos hacen madurar.

Si a los niños se les enseña desde pequeños a ser responsables y a responder de sus actos, con unos valores morales bien aprendidos, reconociendo lo que está bien y lo que está mal, no hace falta ni inculcarles el sentimiento de culpa ni el de la vergüenza, pues razonarán y aprenderán de los bueno y rechazarán lo malo, pues es la única forma de vivir en sociedad y de respetarnos unos a otros.

La Rata Paleolítica dijo...

Esos sentimientos de culpa y vergüenza deben estar ahí, sin ser exagerados ni tergiversados. Se debe ser responsable de los actos, buenos y malos, y uno debe sentir culpabilidad al pegarle una patada al prójimo por hacer el burro, aunque fuera sin querer, y vergüenza al no dejar el asiento en el bus a una anciana que se cae.

O es lo que me inculcaron y me equivoco, y no son necesarios realmente?

Uf, uf...

Jesús.

Javier Parra 1º Bach A dijo...

La responsabilidad

El crecimiento de los niños no está solamente implicado con el desarrollo físico, sino también un aumento de responsabilidades que si en su momento no se han enseñado, no se puede pretender que se aprenda enseguida. E l sueño de todo padre es abrir los mejores caminos a sus hijos, pero tampoco se les puede dejar sin responsabilidades o angustia alguna.

Creo que no soy el único que ha escuchado que uno no se debe tropezar con la misma piedra dos veces y la mejor manera para evitar o saber pasar estos obstáculos es conocerlos y a su vez para conocerlos es necesario tropezar directa o indirectamente con ellos.

La vergüenza y la culpa están relacionadas con la responsabilidad:

* La vergüenza. Con ella se toma en cuenta la reacción que produce en los demás.
* La culpa. Es un sentimiento interno que hace efecto de autorreflexión al haber hecho algo mal.

Yensi 1º Bach B dijo...

A veces el remordimiento es nuestro mayor profesor debido a que somos nosotros mismos sin nadie decirnos nada los que rectificamos y aceptamos nuestro error y pedimos perdón nosotros mismos

Vero 1º Bach A dijo...

Después de lo que han vivido nuestros padres, la generación que viene, es decir, la nuestra, es una generación de niños mimados, que en ocasiones ni si quiera saben enfrentarse al mundo real. Puede que una de las razones sea el significado de la culpa, que muchos padres ya no transmiten a sus hijos, normalmente, para que no sufran traumas. Los padres que se disculpan por sus hijos solo contribuyen a que el sentimiento de culpa no se desarrolle en los niños, haciendo así, que a lo mejor en un futuro, sean chicos con problemas de agresividad o de no saber integrarse.

Desirée 1º Bach A dijo...

Del texto destaco :
¿ No es inevitable para que haya educacion en la responsabilidad que exista culpa?

Claramente habrá que sentir culpa alguna vez, no puedes ir por la vida de pasota y que todo lo que hagas a tu alrededor siempre est bien , porque no siempre se actúa como es debido, ya que el ser humano está hecho tambien para cometer errores.

La responsabilidad es algo que vamos adoptando a lo largo de nuestra vida, porque aunque no queramos siempre va a ser precisa para nosotros.

En la educación nuestros propios padres nos inculcan que cuando algo no esta bien hecho habrá que hacer algo por rectificarlo, lo mejor disculparte y quieras o no sentirás ese sentimiento de culpabilidad que con el paso de tiempo te hará más responsable.

Nicolás 1º Bach A dijo...

¿como podra aprender un niño a responder de sus actos si no hay normas o las que hay nunca son precisas?

Para enseñarle a un niño a responder de sus actos no son necesarias una serie de normas, ya que con las normas se intentan evitar las acciones de una persona adulta, y por eso mismo como estamos hablando de niños éstos no serían capaces de cumplirlas ya que la mayoria de ellos no entenderia lo que es una norma.

La mejor forma de enseñar a un niño a responder de sus actos es que él vea en la gente que le rodea que ellos responden por sus actos y como es un niño él lo único que intentará hacer es imitar a aquellos que le rodean, generalmente a los padres ya que son los que pasan un mayor tiempo con ellos, porque ¿qué son las palabras que aprende un niño sino la mera imitacion de las que oye?, por eso mismo debemos enseñar a los niños CON EL EJEMPLO no haciéndolos seguir una serie de normas que ni siquiera saben interpretar

David Fdez 1º Bach B dijo...

Los Niños de la actualidad sufren de SUPERPROTECCIÓN.

Todos tenemos un hermano pequeño, un sobrino etc...Y todos siempre lo hemos superprotegido evitándoles desde caidas hasta la típica quemadura con el horno, pero de ese modo sólo le hacemos más daño de lo que pensamos, le estamos creando un escudo que dura muchisimos años y les inducimos indirectamente a lo que podemos llamar: Inrresposabilidad, inmadurez, Miedo etc.Hay que intentar no formar ese escudo dejándoles que se equivoquen que es lo más facil que puede hacer el ser humano y de esos errores ya aprenderá

Filoabpuerto dijo...

JESÚS:

Tienen su función y son necesarios esos sentimientos, igual que el miedo nos protege de peligros y tenía esa función en la evolución, la "vergüenza" y la "culpa" nos informan de que algo no va bien y hay que repararlo. Como dices tú: sin tergiversarlos ni extrapolarlos.

Saluditos

Merce

Tamara 1º Bach A dijo...

La responsabilidad es un sentimiento que a veces nos da miedo tanto el sentirlo nosotros, como en un futuro cuando tengamos hijos, el cómo inculcárselo.

Sin embargo, este sentimiento nos hace formarnos como personas adultas conscientes de lo que ocurre a nuestro alrededor y de cómo debemos actuar.

Por eso, desde que un niño es pequeño hay que transmitirle estos valores. Y en mi opinión, éstos se trasladan cuando le explicas con simples palabras como se siente la otra persona tras haber actuado de esa manera.

Otro dato importante en la enseñanza de un niño, es mantener la promesa que le hace los padres, reprenderlo cuando ha hecho algo mal y sobre todo premiarlo cuando lo ha hecho ¡GENIAL!.

Lo que quisiera destacar es que no se trata de que el niño se sienta mal , sino de DE TOCAR UN POCO SU CORAZÓN PARA QUE ÉL LO PUEDA ENTENDER.

Pero lo que si es importante de todo esto, es que estos valores no se pierdan con la etapa adulta, sino que éstos permanezcan y aparezcan otros similares.

Adrian Perera dijo...

Yo creo que lo que deberia hacer un padre a su hijo pequeño es inculcarlo en la lectura y que el niño solo se de cuenta de como es la lectura ya que si el padre le obligase creo que la lectura que ese niño va a descubrir no seria la misma que si lo realizara de la forma q dije anteriormente...

virgi dijo...

Merce, ¡una gozada leer los comentarios! Te felicito, también al alumnado.
Besos y besos

Amparo dijo...

Me encanta este bloque de entradas tan sugerente y tan educativo. El desarrollo moral tiene sus etapas, igual que el intelectual. Lo que puede tener sentido educativo para un niño de cuatro años, no lo tiene para uno de dos. Esto, de manera natural, lo saben los padres y se ajustan a ello, si es que tienen sentido común. A un niño de dos años, el simple hecho de que sus padres digan que "eso" no se puede hacer, convierte ese acto en algo "malo". No hay ningún tipo de autonomía moral.
Sin embargo el niño de cuatro años ya es capaz de ponerse en ciertas situaciones en el lugar del otro y comprender el daño, "la culpa", y sentir con él cuando sus actos tienen cierta repercusión y cierta responsabilidad.
Y no digamos a los seis años, en la que ya empiezan a ser capaces de reflexionar sobre "otras" posibilidades de acción.
Es verdad que hay una sobreprotección excesiva de los padres: nunca estoy de acuerdo cuando dicen que hoy en día los padres no se ocupan de sus hijos; al contrario, no les dejan en paz hasta bien maduritos, asumiendo muchas de las responsabilidades que tendrían que asumir ellos. Es un gran error; aprenden a vivir sin tener claro el "locus de control", la capacidad para ver el lugar en el que está la causa de un acontecimiento, su grado de participación en el mismo.
Bueno, perdón por tanto rollo y adelante!!
Saludos

Marisa dijo...

¡Qué interesante tema! Victoria Camps habla de culpa y responsabilidad. Creo que sentirse culpable es justo lo que evita tomar conciencia de la responsabilidad. Preferimos sentirnos culpables y que nos castiguen por ello o nos castigamos nosotros de alguna manera, a sentirnos responsables; porque ésto indica nuestra capacidad de reconocer lo que hemos hecho, el daño que hemos causado y la capacidad de repararlo, respondiendo por ello. La culpa es un patrón mental aprendido y repetido que nos lleva al victimismo; sin embargo la responsabilidad nos hace seguros y dueños de nuestros actos y nace del sentimiento de sí mismo.
Creo que los niños necesitan ser protegidos y guiados; pero no sobreprotegidos porque esto indica que se "castran" sus movimientos de autonomía. Esta superprotección indica "miedo y angustia" de la madre y/o el padre. Y sus movimientos tiene que ver más con la angustia de sus progenitores, que con la responsabilidad de saber cuidar y guiar a sus hijos. Creo que si los padres han abandonado sus patrones de culpa, angustia y miedo(aunque sea en parte) serán responsables y criaran hijos responsables. Como madre y abuela tengo dos opciones o educo a mis hijos desde mi programación mental aprendida o desde el contacto con mi verdadero ser. Nunca olvido que mis hijos y nietos reflejan absolutamente lo que yo, muchas veces inconscientemente, estimulo. Así que, si algo no va bien, primero busco en mí donde están los errores.

Un abrazo grande a tí Merce y a todos los integrantes de este lugar.
Marisa

Filoabpuerto dijo...

VIRGI / AMPARO / MARISA

VIRGI
Tú ya sabes de qué va nuestra tarea
gracias por tus ánimos.

AMPARO
En la época del "GPS" y qué desorientados que andamos muchos, jeje. Tu "locus de control" lo llevaré mañana al debate de clase.

MARISA

Muy clarificadora la distinción que haces entre esos dos conceptos de culpa y responsabilidad y siempre aprendo de tí y de tu gran profesionalidad

Besos a las tres

Merce

leo dijo...

Peliagudo, sí.
Cada vez entiendo menos la culpa en las acciones involuntarias. ¿Culpa debe asociarse a daño, a motivación, a intención?
La responsabilidad me parece sin embargo inevitable, a pesar de que sea otro concepto que creo manejamos mal (porque generalmente la responsabilidad nos la imponen desde fuera, y eso no me cuadra mucho...)
Como siempre, me voy llenita de preguntas.
Un beso, Merce. Y Cía.

Filoabpuerto dijo...

Yo creo, LEO, que debe asociarse a "sentimiento de incomodidad", de molestia por algo que he hecho, y actúa de alerta avisando de alguna forma de que tengo que reparar ese daño hecho a alguien o a mí misma.

Otra cosa son las utilizaciones que de ese sentimiento se han hecho, fundamentalmente la religión, asociándolo a "pecado", "vergüenza", etc... y las facturas que esa interpretación nos han pasado; una utilización destructiva
que no cumplía el objetivo: reparar el daño, sino que "contaminaba" la autoestima de la persona y la percepción de sí y no era nada constructiva.

La responsabilidad es inevitable como dices y una consecuencia de nuestra estimada libertad. Libre soy de elegir pero también soy responsable de la opción que he tomado y he de "responder" de ello.

Así lo veo yo, un punto de vista más, lo bueno de esto es compartir las visiones

Saluditos
Merce

Beauséant dijo...

estoy flipando con los comentarios.. casi mejor no digo nada que bajo el nivel :)

Ana 1º Bach B dijo...

“El niño no aprenderá a comportarse correctamente si no siente, al mismo tiempo que sabe, que ciertas cosas son mejores que otras”


Los niños de hoy en día no son los mismos que los niños de las épocas de antes. Hoy en día los niños y niñas se sienten más sobreprotegidos de lo que deberían estarlo y sentirse. El niño ahora no tiene el miedo que tenían antes a equivocarse y sufrir consecuencias o dolor, a tener respeto por las cosas, sino que ahora lo hacen todo sin reflexionar ni pesar en que les podría pasar porque saben que siempre va a haber una solución o alguien pendiente de ellos para ayudarles en todo, que en este caso son los padres mayormente, que los sobre protegen y los apartan de lo que yo llamo, “Las lecciones de la vida”.

Para mi las lecciones de la vida es aprender por si mismo, a equivocarse y arreglarlo nosotros solos, a caernos y volvernos a levantar nosotros solos. Eso es la lección de la vida, a aprender una primera vez para no volver a hacerlo a la segunda, y eso, desgraciadamente, hoy en día casi ni existe ya.

Sara Méndez 2º Bach B dijo...

No soy madre, pero si tengo una madre y sé que tanto ella como cualquier otra madre quiere lo mejor para sus hijos e hijas y a veces sin darse cuenta de que protegerlos puede ser malo si se hace de forma excesiva.

Pienso que nsotros los hijos debemos afrontar nuestros errores y aprender de ellos, porque
ahora lo tenemos todo fácil pero no siempre estara mami para ayudarnos, para sacarnos de
esos roblemas en los que tantas veces nos metemos, para cuando necesitamos algo (material)
que nos tienda su mano, etc...
Hay padres que lo unico que les preocupa es que sus hijos estudien, y parecerá increible que
como un padre o madre pueda preocuparse sólo por ese aspecto cuando a los seres humanos
nos rodean más cosas, pues si... Hay padres y madres que cuando llegan de trabajar y ven a
sus hijos lo único que les pregunta es: ¿ Cómo te fue en clase?.
Nosotros nos limitamos a responder y cuando terminamos se dan la vuelta y se van, tenemos
otra vida fuera del colegio o instituto, y que a lo mejor necesitamos más ayuda, consejos, etc...

Existen padres que se preocupan excesivamente de sus hijos en todos los aspectos generales,
padres que se preocupan solo por los estudios de sus hijos y padres que no se preocupan por nada,
es asi y simpre sera asi. ¡ Nadie dijo que el mundo fuera perfecto !

José David Luis Herrera 2ºBach B dijo...

Estoy de acuerdo de que hoy en día hay una superprotección de los padres a sus hijos. Por una parte, hay que ponerse en la piel del padre o de la madre, y seguramente todos concluimos en que queremos el bien para nuestros hijos, debido a que no queremos verlos sufrir ni pasarlo mal, por eso, le damos todo lo que tengamos en nuestra mano. Pero, en realidad, esa superprotección, en cierto punto, le causa un "daño" al hijo porque toda su vida ha tenido siempre lo que ha querido, y esto, tarde o temprano, en su vida va a tener que hacer las cosas por él mismo y ahí si que no va a tener los "mimitos" de sus padres, sino tendrá que sacar las cosas por obra de sí mismo.

Pooja Israni 1º Bach A dijo...

En el día de hoy la mayoría de los niños están muy protegidos por sus padres, quieren lo mejor para sus hijos. Los hijos se aprovechan de ello, y cada vez son menos responsables, es decir no saben protegerse, sus padres les han mimado demasiado, la autoprotección hoy en día no existe y si existe pues cada vez es menos.

Los padres deben de entender que hay que hacerle sentir a su hijo "culpable" sin ser excesivo, sin que se depriman y que lo entiendan que si lo que está haciendo está mal, lo tiene que dejar de hacer.

Es un trabajo difícil pero no es imposible, ¡si se quiere se puede!
En mi opinión la mejor manera que se pueden explicar estas cosas es hablando y entendiendo el uno al otro y así evitamos cualquier mal entendimiento.

Katia 2ºBACH-B dijo...

Siempre he sido partidaria de los términos medios, así que con este tema también. En el mundo actual, hay un poco de todo según el tipo de familia en la que pongamos los ojos. Algunos padres cada vez dejan más libertad a sus hijos, independientemente de la edad de éstos, hasta el punto de que al final quien llega a tomar las riendas de la casa, de la familia en general... es el hijo. Luego están aquellos padres que no hacen otra que ponerles normas y límites sin pensar en que eso a la larga también les va a perjudicar. En conclusión, que lo mejor es tener un termino medio; ni prohibirles absolutamente todo, ni dejarles a su libre albedrío.

Alberto 1º Bach B dijo...

“Entre los sufrimientos habituales está el de tener que responder de lo que uno hace si no ha hecho lo que se esperaba que hiciera”


Es un sentimiento que los padres intentan que sus hijos no lo sufran, pero se equivocan, porque deberían dejarlos que aprendan de los errores, ya que es como mejor aprenden los niños y es bueno también aprender de lo maño, porque no siempre vas a tener a tus padres para protegerte o sacarte del apuro.

Sara Perera 2ºB BACH dijo...

La verdad esque hay padres que protegen muchisimo a sus hijos y otros que directamente pasan de ellos.Yo pienso que debería haber un punto medio en el que se proteja a sus hijos en lo que deban y puedan ya que si acostumbras al niño a resolverle todos los problemas le costara vivir solo en esta sociedad.

Mi Opinión respecto a los terminos de culpa pienso que siempre tiene que haber un minimo sentimiento de culpa en el niño ya que así sabra que es lo que esta bien y lo que esta mal,y así,poder rectificarlo.

Selena 1º Bach A dijo...

En mi opinión, la responsabilidad es algo que se obtiene si desde pequeño te han planteado unas normas y han sido constantes. Si siempre te han sobreprotegido tus padres eso puede generar inmadurez, poca responsabilidad y los niños están más desorientados. Pienso que hay que tener un límite sobreprotegiendo a los hijos porque a la larga puede causarles problemas. Por otro lado, creo que la responsabilidad se adquiere aprendiendo de errores y/o implantandote unas reglas. Un sentimiento que tiene algo que ver es el de la culpa; ya que el sentirte culpable de algo te hace aprender y ser más responsable

Nassim 1º Bach B dijo...

En mi opinion la sobreproteccion es perjucicil para el desarrollo de los niños por el hecho de que no sabran afrontar situaciones perjudiciales en el futuro debido a que sus padres siempre han respondido por ellos. La proteccion de los niños se debe llevar a cabo de una forma controlada sin excedersa y permitiendo que estos aprendan de las circunstansais de la vida.

Alejandro Rguez 1º Bach A dijo...

En el texto se habla sobre la superprotección de los “nuevos” padres hacia sus hijos y la responsabilidad que se les quita de encima a esos niños. Los llegan a proteger tanto que los perjudica hasta el punto de que el niño ya no sabe cómo responder a sus actos, produzcan éstos buenos o malos efectos.

El término “responsabilidad” es cada vez mas complejo, debido a la ausencia de normas y valores, que antes eran impensables de perder, eran necesarias. Ahora, parece ser que los padres entienden como disciplina premiar o castigar a los niños según las consecuencias de los actos de sus hijos. Esta actitud es totalmente negativa.

En los tiempos que corren actualmente el significado de “culpabilidad” es casi obsoleto. Los padres para proteger a los hijos les quitan ese sentimiento de culpa, y por ello les quitan también ese sentimiento de responsabilidad ante los actos que cada uno de ellos comete.

Hablamos de la vergüenza como consecuencia de la culpa. Estas dos son complementarias, y por ello ambas son nefastas, desvían el sentido de la conciencia humana y es más, incluso consiguen manipular los sentimientos de cada uno de nosotros, por ellos rechazamos estas dos culturas. La deshonra de una persona lleva consigo la vergüenza de ésta, y por ello se nos plantea la pregunta de: ¿cómo explicar algo que vemos como malo, si rechazamos ese valor?.

Nunca se aprenderá que ese valor es malo para uno mismo si no lo sufres, en conclusión, si no superas esa cultura que llamamos vergüenza jamás sabremos que es un valor nefasto para nuestra vida diaria.