lunes, 8 de octubre de 2007

77.-En el desierto no hay atascos (2)

Cuando tenía más o menos trece años volví con mi hermano al desierto junto a mi padre. Me sentí feliz de volver a aquella vida en la que el alma de mi madre todavía se dejaba palpar. Una noche tuve un sueño. Mientras me encontraba sentado en lo alto de una duna, un avión venía a posarse en tierra, cerca de mi. De él salía un hombre blanco y me preguntaba si quería visitar el mundo. Le contesté que si y me desperté sobresaltado. Mi padre se asustó y quiso saber que me ocurría. Le contesté que en un sueño, un avión quería llevarme a través del mundo. Me respondió que acaba de tener una pesadilla. ¿Fue casualidad? Unas semanas después conocí a una periodista del Paris-Dark que paseaba junto a su marido por las cercanías del campamento. Un libro cayó de su bolso y me agaché para recogerlo y devolvérselo a la señora. Esta me enseñó los dibujos, que me fascinaron. En el momento de marcharse, me lo regaló: se trataba de “El principito”. Desde aquel día ya no pensé más que en una cosa: ir a la escuela para aprender a leer y enterarme de la historia de aquel hombrecito.
Aquel mismo año perdí a mi abuelo y me hice todavía más huérfano. Ya nada me retenía en la tienda junto a mi padre y su nueva esposa. Sentí que había llegado el momeno de emprender mi vuelo.(…)
Fascinado siempre por Saint-Exupéry, alimentaba, ansioso por conocer al gran escritor, el sueño de ir a Francia. Deseaba decirle que su Principito tenía un hermano…
Aquí escribes el resto del contenido que se verá al picar "leer mas...", sobrescribe este texto

8 comentarios:

Anónimo dijo...

lo mismo que dije en el 1º

Anónimo dijo...

Esta situación no es única ya que como este niño hay muchos que están en su situación o aun peor.Pero lo que más me sorprende es el interés que tiene por aprender y conocer mundo y de no preocuparse tanto de su situación, del día a día.A veces necesitas un pequeño impulso que te haga salir adelante y depender de ti mismo.Para mi este impulso se lo da el libro ya que al verse incapaz de poder leerlo, busca soluciones.Podriamos decir que la propia ignorancia es el estímulo, a partir de ella quiere saber.

Anónimo dijo...

Del nuevo fragmento que ha extraído Amal del libro "En el desierto no hay atascos", destaco la frase "Sentí que había llegado el momento de emprender mi vuelo",.
Es cierto, hay un momento en que esa necesidad de ser nosotros mismos se presenta con nitidez, irrumpe con fuerza dentro, queremos ser nosotros, tomar las riendas de nuestra propia vida, emprender esa aventura de forma más consciente.

Anónimo dijo...

LA LECTURA UN VALOR PARA CRECER Y QUIZÁ NOSOTROS NO LA VALORAMOS SUFICIENTEMENTE.
A mi me sorprende el interés que le pone en aprender a leer cuando se encontró el libro. El libro es el motivo para cambiar su futuro. Me conmueve como en determinadas zonas del mundo un libro puede significar algo distinto. En la actualidad nosotros nos encontramos un libro y ni si quiera nos agachamos para recogerlo, eso tiene un parte buena y una parte mala, la parte buena, si no lo recogemos es porque nos podemos permitir comprar los libros que queramos, y la parte mala es que en otros paises estan deseando tener algun libro que poder leer.

Anónimo dijo...

¿ESE SUEÑO NO SE CONVERTIRÁ EN TERRIBLE PESADILLA?


¿Soñar con internarse en la gran ciudad? ¿Bajo las sombras de los grandes edificios donde sobrevive el mundo voraz del vendedor? ¿En el que la mentira y la competencia más feroz son las características predominantes? Estas son unas de las características más destacadas de las ciudades de los países desarrollados. El autor de este libro si bien es verdad, comenzó siendo ignorante de nuestras culturas europeas y su sueño era llegar a alcanzarla. ¿Sería esto como él habría soñado? ¿O se verá perdido entre los inmensos edificios? Rodeado de atascos… con millones de personas a su alrededor que no viven como su pueblo natal por sobrevivir, si no que buscan además de vivir a gusto como cualquier ser humano también buscan la avaricia del deseo por tener mas que los demás y nunca llegan a conformarse del todo. Como le ha ocurrido al autor, muchas veces huimos de los lugares y personas a las que queremos y hemos perdido. El ya perdió a su madre, la cual siempre permanecerá en el recuerdo de todos ellos, como en cualquier familia perder a una madre, es un hecho que marca a todos y por muy fuerte que seamos nunca estaremos bien del todo.
Volviendo al tema del autor, no se dio cuenta de lo mucho que echaría de menos a su abuelo. Hasta después de su muerte se percató de la poderosa presencia que suponían en su vida, sus seres queridos. Y sintió que cada vez había menos situaciones y cosas que lo agarraran a quedarse ahí.
La vida es un viaje sin fin de crecimiento y desarrollo, y la muerte no significa forzosamente el final de la vida. “Podría considerarse al autor y (protagonista) como la profecía de un visionario que, ya vislumbraba el resquebrajamiento de la llamada "sociedad de bienestar" de un futuro no muy lejano aparece como un héroe en un mundo en el que éstos ya no existen y se empeña en dejar para la eternidad la huella de su paso, y aun no sabemos si lo conseguirá en este capítulo. Habrá que esperar a que lo añadan al blog.
Sin duda, es un tema que invita a la reflexión, sobre el precio que hay que pagar para alcanzar, en este caso, el llamado "sueño europeo".

Anónimo dijo...

maria jose, nocturno 2ºbach


Realmente no creo que sea el libro lo que le motiva y le despierte un cierto entusiasmo. Yo creo que cabría hablar de muchas cosas. Como por ejemplo; el libro, lo que hace es que ella muestre interés por aprender a leer y también al querer conocer el autor del libro le hace que quiera viajar.
Pero que ella quiera viajar, esa decisión de viajar, también se debe a que siente que allí ya no tiene nada que hacer. Ya que su abuelo murió.

Yo creo que es un batido de muchas cosas:
Sentimientos, intereses, emociones… que están a flor de piel. Lo que le hacen actuar y tomar ciertas decisiones que van a ser fundamentales.


“EL CAMBIO ES VIDA”

Anónimo dijo...

Me gusta ver que esta persona quiere superarse y cumplir sus sueños

Anónimo dijo...

Lo que me ha llamado la atencion del texto son las ansias de liberacion del niño pese a sentir amor por su tierra.
Me ha recordado mis momentos pasados en Italia donde dejé mi familia amigos casa y por eso me doy cuenta de que dejar el sitio donde naciste es algo que no se puede olvidar